La Infancia Feliz.

Finalmente llegó la desintegración del núcleo familiar, como tal, no asi la relación padres-hijos. Afortunadamente esto nunca sucedio, y al dia de hoy agradezco al cielo que asi haya sido.
Cambio de Vida
A mis escasos 7 años de edad, a dejar los amigos de la primera infancia escolar, los parientes cercanos y cambio a la gran capital, un futuro incierto, sombrio, los miedos internos que provocan frio en el alma.
Los primeros meses sin colegio, habituandonos a la nueva vida: Vita, la abuela paterna, el padre viajero, la loncheria iniciando actividades, entrarle al rol y servir de algo, todo novedoso y al mismo tiempo sin interes, mi mente ocupada con la palabra magica, Divorcio.
Porqué?, Cómo?, Que fué?, que pasará?, con el devenir del tiempo, las interrogantes tomaron otra forma, las dos personas encargadas de nuestro cuidado resultaron ser magicos, lograron que en cosa de meses las expectativas y el animo fueran otros. Paseos familiares con el particular estilo de estas bellos seres: Chapultepec con bolsas de viandas, nada faltaba, la horchata, las tortas, los tacos, el
postre, el transporte urbano, clásico de la capital, mezclado con el sabor provinciano, ingenuo, noble y bullanguero de la abuela; Y al grito de "llegamos Toño", comenzaba la desbandada de los pinillos y en ocasiones de los vecinos que nos acompañaban.
El regreso a clases, nueva escuela, nuevos maestros, sin amigos, en poco tiempo ya me habia ganado el cariño de mi maestra, quien no se si por instinto o conocedora de mi situacion, me brindó siempre un apoyo valiosisimo, yo respondí con buenas calificaciones y sobresaliendo en todas las actividades escolares, declamador, bailarin, maestro de ceremonias.

Despues llegaría mi mejor amiga, la bicicleta en premio a mi comportamiento, haaa y me volvi vago, de lo cual les comentaré en la siguiente entrada.